No he sido consciente de las veces que me he repetido que soy insignificante y que mi estadía en ese lugar es efímero. Sinceramente creía que sientiendome así y proliferando un rechazo a convencionalismos y pensando que, justamente en el hecho que soy insignificante, resalta ahí mi individualidad y originalidad, soy digno de vivir y de mirar el mundo con unos ojos distintos... la verdad es que ahora tengo razones para reprocharme todo en la cara, tengo motivos para decir que he estado fingiendo. Las ideas que tengo no me pertenecen, si bien soy un recipiente que contiene una parte de todas las personas o momentos que me han tocado experimentar en el tiempo en que sigo vivo, no sé si se pueda llamar originalidad.
Soy afluencia de otros, soy construcción de otros humanos, esto responde a varias de mis ya planteadas cuestiones nocturnas, tal vez esto explica el afán ganoso que tengo de querer simplificar cosas de mi vida, y cuando las consigo, no tengo ni la más ingenua idea de cómo usar el tiempo ganado. Tal vez esto explica mi sobriedad al referirme a tópicos amorosos, pero cuando llega la praxis reacciono de manera tan mortal, no me refiero a enamorarme y permitir algo de presbicia en mis ojos, sino que cuestiono lo que ya he aprendido; lo pedante de mi actitud se desvanece. Esto no me hace diferente, en lo absoluto, me hace inevitablemente común.
La originalidad es algo riguroso con lo que siempre intento alinear mi actuar y sencillamente es piedra matriz de la cosas que me procuró realizar. Sé que tengo influencias, me complace llamarlas vertientes, vertientes que desembocan en mí, que me llenan de alegría que lleguen a mi pensár. Recuerdo las palabras de un amigo: "Todos necesitamos fuentes de inspiración, libros, canciones, fotos, paisajes, situaciones, personas" sinceramente esto me trae cierta calma. También recuerdo un adagio ya muy vivo en la mente de las personas: "Lo bueno se imita" Esto no sé si sea tan válido para mí, pero es la excusa que diré en las situaciones en las que me vea involucrado responder parte de lo verídico que puedan ser mis historias.
Estoy siendo una forma de expresión de otra persona, que no sé que tanto se vaya a involucrar en mi vida, espero se tome su tiempo.
Estoy pisando tus huellas, pero con mis propios zapatos.
Escribo para dar garantías inequívocas que en algún momento viví, sentí, soñé, deseé, sufrí y amé. Escribo para demostrar que en algún momento existí.
viernes, 27 de marzo de 2020
Desaciertos Subyacentes a la Conciencia
MARZO 21 2020
Elmer Yapo
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
-
El arrepentimiento me está devorando el alma sin tregua a poder respirar para poder suplicar por última vez que te quedes conmigo, ya no ten...
-
— ¿Traerme acá fue coincidencia? — Expresó él con una sonrisa traviesa al final —. Ya de antemano él sabía que ir a esa playa no tuvo nada d...
-
MARZO 29 2019 No sé por donde comenzar... Perdóname... por darme cuenta de tu existencia por olvidarte antes de conocerte por el daño ...

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¡¡¡Muchas Gracias por leerme y por tu comentario!!!